Real Gabinete Portugues da Leitura

Fundado en 1837 por un grupo de inmigrantes portugueses, esta joya neogótica sorprende por la elegancia de su fachada como por su sala de gran altura abarrotada por miles de libros. Con una atmosfera parecida a la de un iglesia, donde la luz se filtra por unas coloridas vidrieras, los lectores tratan de estudiar interrumpidos por una flota de curiosos.

Se encuentra justo al norte del Largo São Francisco de Paula, en la calle Luís de Camoes. Este es uno de los tesoros arquitectónicos ocultos de la ciudad y una de las mejores piezas de la arquitectura neo-manuelina en Brasil. La arquitectura manuelina generalmente se describe como gótico portugués y toma su nombre del rey Manuel I, que gobernó Portugal entre 1495 y 1551. Es diferente a cualquier otro estilo gótico europeo, basándose fuertemente en temas islámicos y náuticos, fusion de ornamentalismo islámico y algas marinas esculpidas, anclas, cuerdas y corales, tipificado por el monasterio de Cristo en Tomar y el Monasteiro dos Jerónimos en Lisboa. El modesto exterior del Gabinete Real, que fue diseñado por el arquitecto portugués Rafael da Silva e Castro, en 1880, se inspiró en la fachada de los Jerónimos. Está decorado con estatuas de Camoes, Enrique el Navegante, Vasco da Gama y Pedro Alvares Cabral, quien reclamo Brasil para Portugal. Más interesante, sin embargo, es la sala de lectura construida en torno a la estructura de acero más antigua de Río. Arcos imponentes decorados con flores islámicas ascienden en espiral a través de las cuerdas de madera de un elaborado techo pintado con claraboyas del cual se suspenden unas arañas de hierro macizo. Hay unos 120.000 libros en la colección de la biblioteca, muchos de ellos muy raros.